Que mala es la soledad

Esta frase, que conocemos de nuestros abuelos, ahora tiene base científica: un equipo de la Universidad de Chicago demuestra que la soledad, tanto en personas jovenes como en adultos, es mala para el corazón, ya que aumenta la presión arterial tanto como lo hacen la vida sedentaria o fumar.

Sin embargo, mientras que el cuerpo de una persona joven puede compensar el cambio de presión y no llevar a efectos perniciosos, podría ser muy perjudicial para una persona mayor. Además, se suelen dar más casos de soledad en estas personas, al jubilarse o al sufrir algún tipo de enfermedad que les incapacita y les retiene en casa.

Fuente: New Scientist